La magia de nuestra navidad trascendió las fronteras del Parque del Agua. Recorrimos barrios y comunidades del área metropolitana, llegando directamente a los territorios con la quinta versión de la “Ruta de la Navidad amb”.
Cada sector visitado se convirtió en un escenario de encuentro familiar y de conmemoración de una temporada que nos invita a todos a vivir el más grande espíritu de navidad y solidaridad. A través de un show navideño, actividades culturales y sorpresas, la Ruta llevó momentos de alegría a niñas y niños; más que un evento, fue una oportunidad para compartir, para mirarnos como comunidad y para estar presentes en el territorio.
El recorrido 2025 incluyó los sectores de Granjas y Brisas de Provenza, Prados del Sur en Floridablanca, El Pablón en el norte de Bucaramanga, el sector de Bambúes en Girón y el municipio de Charta, un territorio clave dentro de la red de municipios productores de agua.
Llegar a Charta también fue un acto de reconocimiento a quienes cuidan las fuentes que hacen posible que el agua llega a miles de hogares en el área metropolitana de Bucaramanga.
Este ejercicio hace parte del compromiso del Acueducto Metropolitano de Bucaramanga S.A. ESP., con la generación de bienestar y el fortalecimiento de nuestros mecanismos de comunicación y relacionamiento con nuestros usuarios.
Como empresa de los ciudadanos, entendemos que nuestro propósito va más allá de prestar un servicio esencial con la más alta calidad: se trata de acompañar, escuchar y construir vínculos con las comunidades, especialmente en fechas que invitan al encuentro y a la empatía.
La Ruta 2025 fue posible gracias al trabajo conjunto con la organización sindical Sintraemsdes, sindicato de los trabajadores del acueducto, quienes se sumaron a la iniciativa de principio a fin, al igual que un grupo de trabajadores que voluntaria y decididamente apoyaron la logística y coordinación de cada evento. A este esfuerzo se unieron aliados como el periódico Vanguardia y Q’hubo.
Seguiremos recorriendo los territorios, convencidos de que estar cerca, genera bienestar y crea espacios de encuentro, también es parte de nuestra responsabilidad con la ciudad y su gente; cuando la Navidad amb llega a los barrios, deja algo más que recuerdos: deja comunidad.





